México ocupa el primer lugar mundial en piratería de agua embotellada.
Un alto % de los garrafones están rellenados de la llave o fabricados con deficiente calidad.
Existen “clonadores” que falsifican etiquetas y tapones de los garrafones.
Los repartidores ganan más por vender un garrafón rellenado que por la propina que reciben.
Actualmente nadie garantiza la calidad del agua embotellada que llega a nuestros hogares, oficinas, escuelas, etc.
Actualmente es más caro un litro de agua que un litro de gasolina.
Se estima que el año pasado fueron desechadas más de 7.8 mil millones de botellas de plástico PET de agua embotellada en presentaciones no retornables.